Quimi Portet nació en la pintoresca ciudad de Vic (provincia de Barcelona). A los siete años, y después de tomar la Primera Comunión mediante el vistosísimo rito católico, en una ceremonia multitudinaria en la que un cura al que le faltaba una oreja administró la sagrada forma a alrededor de noventa pequeños bípedos cerca de la plaza Tetuán; nuestro hombrecito debutó tocando la guitarra en una fiesta familiar, y a los diez años ingresó en una tuna escolar. Quería ser...