No renunciaré a esa paz que tú me das día tras día
A cambiar mis penas por tus alegrías
Y ese amor que tú me das con garantía
No renunciaré a esa flor que tú me das cada mañana
A vivir constantemente enamorada
Y a soñar juntos los dos de madrugada
No renunciaré ni a tus ojos, ni a tus brazos, ni a tu boca
Ni a tu risa, ni a tu loco proceder
Ni a tus besos con los que me vuelvo loca
Ni a la fuerza que tú me haces querer
No renunciaré ni a tus ojos, ni a tus brazos, ni a tu boca
Ni a tu risa, ni a tu loco proceder
Ni a tus besos con los que me vuelvo loca
Ni a la fuerza que tú me haces querer
No renunciaré a la luz que tú me das y estoy oscura
Al saber que eso es amor y no aventura
Al encontrar limpio el camino de la ciudad
No renunciaré, yo sin ti sería un barco a la deriva
Una mazelas que va por la eternidad
Y sin ti sentido no tendría mi vida
No renunciaré ni a tus ojos, ni a tus brazos, ni a tu boca
Ni a tu risa, ni a tu loco proceder
Ni a tus besos con los que me vuelvo loca
Ni a la fuerza que tú me haces querer
No renunciaré ni a tus ojos, ni a tus brazos, ni a tu boca
Ni a tu risa, ni a tu loco proceder
Ni a tus besos con los que me vuelvo loca
Ni a la fuerza que tú me haces querer
No, no, no, yo no, no
Ay, no, no, no, yo no, no
No, no, no, yo no, no, yo no renuncio
Esa paz que tú me das que alumbra mi oscuridad
No, no, no, yo no, no, yo no renuncio
Esa luz que a ti te brilla que me llena de alegría
Es la cosa
Todo lo que quiero de ti es el amor que tú me das
Lo que yo quiero de ti (que tú me das)
Son tus ojos, tus caricias que me llenan de paz
Todo lo que quiero de ti es el amor que tú me das
Que tú me das (que tú me das)
Si tu sonrisa que brilla yo no puedo estar
Todo lo que quiero de ti
Es la cosa
Todo lo que quiero de ti
Lo que me gusta de ti
Todo lo que quiero de ti
Todo, todo, todo de ti (que tú me das)
Sin ti no puedo estar
Opa Lucho dame salsa