Me dices que la deje
Marcharse madre mía
Me dices que no piense
Ya más en ese amor
Que si después de armarla
Tan hondo me traiciona
No es digna ni siquiera
De que le diga adiós
Se vé que ignoras todo
Lo que en el alma siento
Se vé que no comprendes
Mi pobre corazón
Yo sé que es una ingrata
Que mucho otros quereres
Más para maldecirla
No quiero tener voz
Dejame con mis penas
Dejalo al corazón
El sabe lo que hace
Dejalo en su dolor
Dejame que suspire
Por el perdido amor
Si el fue tan inconstante
Porque he de serlo yo
Dejame con mis penas
Dejalo al corazón
Que sea de mi vida
Lo que disponga Dios
No le deseo males
Ni siento, ni rencor
No sabe de venganzas
El verdadero amor