Apareció de la nada a finales de la década pasada firmando un puñado de remezclas para artistas como The Black Ghosts, Bonde Do Role, This Kills y Armand Van Helden y, conforme pasaban los meses, el misterio no hacía más que crecer. Porque Fake Blood no concedía entrevistas, su rostro no aparecía en las imágenes promocionales y, por si fuera poco, se sacó de la chistera “Mars”, un himno sintético que puso del revés las pistas de baile de medio mundo a golpe de electro zumbón. A...