Rollie Pemberton está a punto poner en el mapa al inexistente hip hop canadiense. Hijo de un reputado dj radiofónico de música negra, este obligado outsider es un agudo analista de nuestra sociedad del espectáculo, la cual retrata con un sentido del humor acerado y una ironía brutalmente ‘honesta’ (palabra habitualmente ausente del vocabulario gangota). Ya desde su primer elepé, Breaking Kayfabe (05), con el que forzó la admiración de los medios, teñía sus inquietos fraseos de...