La música de Gregor Samsa (protagonista de "La Metamorfosis" de Kafka), se extiende durante los 27:36 que dan título al disco, volatil, eterea, arrullando melodías sobre las capas de guitarras tan herederas de Slowdive como de My Bloody Valentine o Cocteau Twins. Con un pie en el shoegazer y otro en el post rock menos transitado, ese que en vez de mirar hacia Canadá lo hace hacia Reino Unido (Hood), la música de Gregor Samsa es como un bálsamo curativo, como si Low sufriesen una...